11/3/11


No sé cómo.
Pero, de repente, un día ya no sentí.
Y todo se volvió negro. Los cristales se empañaron y no conseguía ver nada. Así que me quedé quieta en esa oscuridad. Y me tapé los oídos. Y no escuché. Y no pude ver. Y llegó un momento en que supliqué. Y te encontré.

Entonces todo se volvió blanco. Porque había una razón (te estoy buscando).

Ahora, sigo mi camino entre cristales blancos donde dibujo las notas (que imagino son de tu voz) que me guíen por el camino correcto.
Porque no sé si siento demasiado o no siento. Y no soy capaz de avanzar. Siempre vuelvo al mismo cristal.

Y no sé si estás detrás.

Porque siempre se ha vuelto a empañar.

4 comentarios:

  1. Es tu aliento el que lo empaña, cálido y con miedo... ¿no has querido estirar el dedo y dibujar un corazón? si estás aterrada, te ayudo:
    http://t3.gstatic.com/images?q=tbn:ANd9GcReyrHiZn4RFFDYFh_yR0DMw4kZe49XoYMbWJaMyyNDvvZgqXia&t=1

    Detrás sólo puede estar lo que te queda de felicidad.

    19 de marzo, puede que la marea suba y flotes en el mar. Ojalá sea así

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  2. Si dejo de respirar igual no se empañan, pero me ahogaría, creo...
    Espero que ese día haya una Luna muuuuy grande.

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  3. Puedes respirar y abrir la venta, aire fresco en tu vida.

    Seguro que la habrá

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  4. Rompe los cristales y mira.

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susúrrame

No me juzgues tan rápido.
Solo estás viendo lo que yo he elegido que veas.