No puede ser tan difícil. Solo déjate llevar.

No sé si podría imaginarme ese encuentro.
Es tan deseado. Pero tan lejano.
No sabría como reaccionar.
Es como cuando te preguntan..¿Qué harías sin entrara un ladrón en tu casa?
No creo que nadie, a parte de quien ya haya sufrido un asalto así, tenga claro que hará lo mismo que dice cuando responde a esa pregunta.
A mi se me ocurren mil ideas.
Podría esconderme debajo de mi mesa en un intento algo estúpido de que no me encontraran si llegan a buscarme.
He pensado bastantes veces, que me subiría al tejado. (Ya lo hice una vez por diversión, ¿por qué no podría hacerlo para escapar?)
Si viera su cara acercándose, poco a poco... Sé que mi corazón latiría rápido, muy rápido, y se pararía por un instante al tenerlo a mi lado.
Si fuera yo la que tuviera que acercarse, posiblemente moriría por el camino. Igual me tropezaría y me caería al suelo...(Torpe, pensaríamos ambos)
O puede que fuera capaz de guardar la compostura con una tímida sonrisa, a pasos lentos, aunque mis mayores ganas fueran las de correr, correr hacia allí, y no demorar más el momento de estar juntos.
Y, ¿al estar a su lado? Al estar frente a frente, cara a cara... Poder observar sus ojos. Que pueda entrar en los míos. Serían segundos, alguno de los dos haría algun movimiento.
Un cálido abrazo estaría bien. Me gustan los abrazos, hace tiempo que no recibo uno... Un abrazo que dure una eternidad. Un abrazo del que no quisiera escapar. Un abrazo que me diera paz.

Puedo imaginármelo de mil maneras distintas, algunas maravillosas, otras un desastre, pero sé que en realidad ninguna será como la imagino.
Cuando sé que soy tan estúpida que los nervios me nublan la mente, me hacen cometer locuras o decir cosas tontas, reirme incluso con histeria.
Cuando me agobio pensando eso, una voz en mi mente me dice:
- No puede ser tan difícil. Solo déjate llevar.


Sonando: First Date - Blink 182