7/6/09

algo más

Recuerda con nostalgia tu infancia. ¿Por qué?
Fácil, eras completamente feliz, y jamás te faltó nada.
Podías quejarte porque no tenías tal o cual juguete que tus amigos sí tenían, pero, en realidad, nunca pasaba de un pequeño berrinche para volver a ser feliz. Nunca tenías que pensar en qué harías dos horas después, a no ser que fuese el día de reyes, o el de tu cumpleaños.
Podías quejarte de que tenías hambre… pero nunca has sabido lo que es tener hambre.
Podías quejarte de que el mundo era totalmente injusto contigo, que alguien no te trató como merecías, que lo hizo mal, pero tampoco conoces esa sensación.

Cuando acabaste esa etapa pensaste que el mundo… qué cojones pasaba con el mundo. Hasta terminar estando en un estado de frustración quizá constante. Y aún no sabes qué falta, qué falla.
Sin embargo a veces, esa frustración desaparece por un momento, por unas horas, por un día, y piensas que tú, a solas, puedes con todo, que te vas a comer el mundo, que nada es tan fuerte o tan importante... Estás en un estado de seguridad máximo, piensas que puedes hacer cualquier cosa y que eso será la solución a tus problemas. Y pasada esa sensación, cual droga que se termina, acabas en un estado peor que el anterior. Porque, al fin y al cabo nadie es un súper héroe. No puedes serlo.

¿Para qué perder el tiempo? El tiempo está acelerado y no haces más que perderlo, aunque insistes en hacerte creer que no, que simplemente todos los demás tienen una concepcion de "perder el tiempo" que para ti es aprovecharlo. Sin siquiera dormir las horas que deberías.

Empieza un nuevo día en el que de nuevo vas a aprovechar tu tiempo. Más o menos. Cumples con tus obligaciones, esas establecidas por... ¿quién? Qué más da, haces lo que se supone que tienes que hacer, ¿no? Sin decidir nada. Y todo sigue igual...
¿Cuál es tu mayor ilusión? ¿Por qué o quién vives? Espectativas...
Piénsalo, no vas a poder hacerlo sin los demás. Si pudieras, no habría una sociedad. Porque nadie necesitaría a nadie.
Pero el estado de frustración aumenta cuando pones tanto esfuerzo en hacer algo y no lo consigues...
Entonces, ¿para qué seguir? Y entras en un gran círculo vicioso en el cual, no hago nada porque nada saldrá, y en realidad nada sale porque no haces nada...

Para qué seguir...Joder.

3 comentarios:

  1. Siempre sigues por aquellos que te importan :P

    ~

    ResponderEliminar
  2. Siento no haberme pasado antes a comentar... pero que sepas que ya había leído la entrada...

    Yuu, yo no hago más que darme hostias contra el suelo... pensé que el mundo sería bueno conmigo si yo me portaba bien con él y, cuando me puteó, me volví diferente...

    Sí, el mundo es injusto, cruel, asqueroso... como la vida... pero yo estoy dispuesto a volver a confiar si alguien me da un empujoncito...

    ¿Para qué seguir? Porque a lo mejor, mañana, el mundo es un poquito mejor =P

    ***

    Ahora en serio... no sé si el mundo cambiará... pero... ¿por qué no esperar a ver qué pasa?

    ResponderEliminar
  3. Como diría mi viejo amigo Mill: mejor ser Sócrates insatisfecho que ser un cerdo satisfecho', a mayor expectativa mayor es el fracaso, pero ¿qué sería de la vida sin ese punto de frustración que nos incita a superarnos?

    (¿has hecho selectividad? ¿qué taaal ha ido? )

    ResponderEliminar

susúrrame

No me juzgues tan rápido.
Solo estás viendo lo que yo he elegido que veas.