1/1/09

Duda

Supongo que con esto de un nuevo año, todo el mundo comienza a pensar, a plantearse un montón de cosas... Estos días atrás, según se acercaba más el año nuevo, y con él, muy pronto, quizá demasiado pronto, mi cumpleaños. 18 años. Dieciocho.
Y comienzo a ver que estoy metida en la eterna duda. La eterna divagación. El eterno "no sé", como si no fuera capaz de decidir por mi misma. Nunca sé nada.. No se a donde ir , qué camino escoger, no hago más que esconderme entre los arbustos del sendero.

Hoy no me sentía nada bien. Cuando he visto que de verdad no podía estar más en mi cuarto sin hacer nada, absolutamente nada, he decidido que necesitaba un rato para mí.
No tenía ni idea de cuánto tiempo sería. ¿Cinco minutos? ¿Una hora?
He cogido a la perra y me he largado con ella, así tenia una excusa para salir a dar una vuelta, sola, sin tener que dar explicaciones de a dónde iba y por qué me iba.
Solo quería pensar un rato y ordenar mis ideas, mis pensamientos, algo que no hago desde hace mucho tiempo, replantearmelo todo...

Decido que no quiero escuchar alaridos ni guitarras eléctricas taladrándome los oídos, así que me hago una lista de reproducción de piano, canciones lentas, baladas, instrumentales...
Voy andando y cuando llego al final de la carretera, al lado del cementerio, veo que está todo embarrado. ¿Cuándo ha llovido? No importa, el barro hoy me importa una mierda, me importa una mierda que los pantalones que llevo son nuevos, o que las deportivas me las haya comprado hace menos de dos meses, no me importa, quiero andar, así que sigo andando sin preocuparme por el barro.
Y entonces me pregunto ¿Cuándo empezó esto? ¿Cuándo empecé a no saber lo que quería? A dudar siempre, a dejar mis decisiones en manos de otros, a no tomar la iniciativa nunca...
El momento está claro. El momento en que me dí cuenta de que, con mis decisiones, no conseguía nada que no fuera causar daño, o decepcionar e incluso perder a la gente que más quería. Fue entonces cuando me metí en un círculo vicioso de no hacer nada, quedarme totalmente pasiva, para que los demás hicieran las cosas por mí, y sin a penas resultado: tardaba más en hacerlo, pero seguía decepcionando y perdiendo a la gente.

No tengo ni idea de que hacer, no sé si continuar así o cambiar, la elección es mía, de nadie más... Solo yo tengo posibilidades para coger mi vida y cambiar mi rumbo, sólo yo soy responsable de mí misma. Pero..claro. Es más fácil dejar todo en manos de otros para así liberarte de la culpa..
Está oscureciendo y una gota me resbala por la barbilla. Mierda, está chispeando.. Miro hacia arriba y parece que sí, que va a chispear, todo está lleno de unos nubarrones negros estupendos, y encima se está haciendo de noche, así que decido darme la vuelta. Dejo la mente en blanco, ya he tenido sufiente. Ni si quiera estoy escuchando la música... Pasa un rato, y cuando comienza "Creep", noto que mis gafas están empañadas. Me las quito, y me paso la mano por la cara.

No era lluvia. La tengo empapada en lágrimas, y ni si quiera me había dado cuenta. Suelto un sollozo ahogado. ¿En qué mundo vivo? Ni si quiera me doy cuenta de las reacciones de mi propio cuerpo. En ese mismo instante en el que tengo el pecho oprimido por la angustia, mi perra decide que es el momento de ponerse a vaciar una madriguera. Ni de coña. Tiro de la correa y sigo andando, no puedo quedarme quieta ahora.
Al final he conseguido dejar la mente totalmente en blanco y sumergirme en la música, Kiss the Rain, Forever Love... Sólo quedaban instrumentales.

Cuando ya estoy muy cerca de mi casa, veo una pequeña luz azul. Me quito un auricular. Son dos "bakalas" bajando la cuesta. Bah.. Me pongo otra vez el auricular y agarro bien la correa de la perra, para evitar que salga hacia ellos. Justo al pasar por su lado, me tropiezo con una piedra. Genial. Escucho las risas de los estúpidos niñatos y no puedo evitar soltar un montón de improperios, de los que ni si quiera me acuerdo. Se me quedan mirando anonadados, pensando, seguramente como yo, que de dónde cojones he sacado tal cantidad de palabrotas. No me importa, sigo andando, me he desahogado y me he quedado bien agusto.

Cuando llego a la esquina de mi casa me limpio bien la cara, subo, saludo y me subo a mi cuarto después de darle la chuchería a Duna, será mejor que no me vean la cara. No enciendo la luz de mi cuarto, me dirijo directamente al ordenador y escribo estas líneas, como pretendiendo deshacerme de lo que ha pasado dejándolo en un montón de letras en la pantalla. Y quizá sea así.
No me he quitado los auriculares. Voy a seguir escuchando música... es lo único que sabe y puede calmarme.

4 comentarios:

  1. Po vaya empezando con una entrada asi el año >_<U

    "Fue entonces cuando me metí en un círculo vicioso de no hacer nada, quedarme totalmente pasiva, para que los demás hicieran las cosas por mí, y sin a penas resultado: tardaba más en hacerlo, pero seguía decepcionando y perdiendo a la gente."

    Que yo recuerde (o almenos cuando nos conocimos y los dos siguientes meses) siempre te veia muy activa, decidiendo por los demas (cosa que almenos a mi, no me molestaba).

    PD: No importa que seas pasiva, a mi lo que de verdad me importa es que formes parte tanto de mis recuerdos como de mi presente.

    ResponderEliminar
  2. Los 18 no difieren en mucho de los 17... sólo en que legalmente eres independiente y que puedes conducir...

    A todo el mundo, alguna vez, se nos ha pasado por la cabeza cuesionarnos todo nuestro futuro... y yo ya me sé la respuesta... pero no te la voy a decir porque el juego es descubrirla por uno mismo. Vivan los 20 tacos xD

    Un beso!

    ResponderEliminar
  3. Mírate a ti misma, mira como te tratas. Eres tu la persona más importante en tu vida, no puedes vivir sin tí, tienes que darte tiempo. Nadie sabe al 100% ni esta seguro al 100% de lo que hace, yo pienso que no es questión de tomar decisiones o no, sino de escucharse. Date tiempo, no te presiones, quizás ahora escuches un leve susurro que sale de tu interior, ve practicando, ve dándote espacio y ve luchando contra los miedos que te oprimen y te van atando de las manos y los pies. La etapa es dura, pero piensa que no eres la única a quién le pasa, todos tenemos dificultades, no las mismas, pero no hay dificultades mejores que otras. Ahora es el momento de empezar a vivir, de dejarte llevar, llevar a cabo tus deseos, de reencontrarte contigo misma. Y no olvides que tienes un montón de personas a tu alrededor que están dispuestas a hecharte una mano. Tampoco dejes que la pena te enamore y que únicamente veas tu propio dolor.. Todos somos como tu, todos sentimos, todos tenemos miedos, una muy buena forma de abrir la mente es mirar a los demás, suele pasar que es más sencillo ver la solución en el otro antes que en uno mismo, estoy seguro que puedes aprender muchísimo y te sorprenderá lo bien que se siente uno cuando ha podido ser de ayuda para alguien, aunque parezca algo sin importancia.. Un abrazo, un "¿Cómo estás?", un "Gracias por todo". Piensa que a tu alrededor tienes personas que sufren por ti, que te aman, que te quieren, que te hechan de menos. No estás sola, nunca lo estarás recuerdas? Poco a poco verás como las nubes se van dispersando mostrando un sol radiante que alumbrará tu camino, estoy seguro que encontrarás "the best of you". Cuidate

    ResponderEliminar
  4. Recuerda estas palabras: "Tu eres Raquel Garcia Cobeña".
    Todo lo que esta a tu alrrededor lo puedes cambiar en mayor o menor medida, simplemente intenta no tener miedo a actuar, sabes que hubo, hay y habra gente que apoye, ten valor y animate!! (se que son solo palabras y es muy facil decirlas... y hacerlas es otra historia, pero como tu alguna vez nos ayudaste, ahora nos toca a tod@s l@s que te conocemos animarte!!)

    Un kisiño lindiña.

    ResponderEliminar

susúrrame

No me juzgues tan rápido.
Solo estás viendo lo que yo he elegido que veas.